Ayer leí un ensayo entretenido sobre el amor, jaja, no lo estaba buscando, pero lo encontré en un texto con el que preparaba clases; así que tomé nota de algunas ideas que me parecieron divertidas y de otras que me parecieron interesantes.
El libro se llama Una araña en el zapato y el autor del texto es Augusto Albajari y su texto está basado en el de Roland Barthes, Fragmentos de un discurso amoroso (ya había hablado yo de cuánto me gusta la intertextualidad)
Este señor escribe un ensayo sobre el proceso de enamoramiento y desenamoramiento (esa palabra existe????, pues debería)
Entonces, conozco a alguien y me gusta, la primera cita implica la presentación, que comienza con las pregunta y las respuestas al qué soy; es decir, en qué trabajo, qué hago.
Luego viene el cómo soy y finalmente el quién soy. Pero claro, así y todo, con tanta pregunta y presentación, no se puede decir que conocimos al otro en la primera cita, por más larga que haya sido.
Dice el autor que durante esas primeras charlas estamos en el proceso del goce narrativo, de encontrar puntos en común, y que uno disfruta narrándose a sí mismo.
Luego llega la etapa de los estímulos... es decir aquellos roces que nos llevan a las preguntas de "pegó su brazo al mío sin querer o queriendo?", "por qué despegó mi rodilla de la suya"?, "fue o no fue un roce?" "por qué se apartó?"
Entonces lleagmos a lo que llama la "región paradisíaca de los signos sutiles y clandestinos"...
les suena????
Y bue, llega el punto de la petición del número telefónico, que se da o pide casi accidentalmente, jaja, como sin querer queriendo.
A continuación llega el momento de las dudas neuróticas… llamo o no llamo, a qué hora llamo, con qué pretexto llamo... otra vez
les suena????
Y dice ante esto Albajari dice "En la conquista amorosa la duda solo se resuelve con el acto y no con un argumento", y le doy la razón en este punto.
"… que me haya dado el teléfono es un hecho y no un signo a interpretar.
Todo significa… estoy condenado, por enamorado, a la duda, a la estrategia, a la táctica, a la interpretación. Envuelto en el discurso amoroso, me impido disfrutar de los episodios de una conquista amorosa."
"Sueño varias veces con él, sueño sin dominar la escena y entredespierto, siento que sí puedo manejar la situación… sufro en los dos casos, el es karma de enamorado previo a la nueva cita.
Cargo con el deseo y el dolo de lo que puede ser, de lo que puedo hacer."
Luego llega la etapa de las dudassssssssssss, la reafirmación, la inseguridad:
"Cuando ya estamos saliendo
Seré gracioso, seré interesante, me esfuerzo por ser original, pero tiene sentido? Porque él no se esfuerza, él es así. Ahora lo necesito, lo extraño, lo quiero para mí."
"La sensación de carencia, es la que genera dependencia de quien supuestamente tiene lo que me falta."
Y llegada mi lectura a este punto me pregunté... somos todas tan parecidos?, de verdad buscamos en el otro aquello de lo que carecemos????, me gustaría que no fuera así, que no buscáramos juntar carencias, que fuera algo más, algo tangible.
"Espero que él llene mi vacío, me ilusiono suponiendo que ella me brinda lo que necesito, lo que no tengo. Mi seguridad proviene de tener un lugar en el Otro."
"En el amor, el Otro ocupa un lugar crítico del cual depende la autoestima del sujeto, la reconstrucción del yo. Recién cuando nos confesemos enamorados quizá vuelva a sentirme a salvo, acaso deje de preguntarme si soy gracioso o interesante, y me entregue a mí mismo."
Y claro, llega el momento de perder la individualidad, de dejar a los otros por él...
"tomo conciencia de que elegir estar con ella es renunciar a todos los otros."
Vienen las preguntas que nos hacemos sobre eso de que el amor es eterno mientras dura...
El para siempre… las relaciones que me pierdo de tener
Y el autor entonces comenta que "El amante para algunos remedia esta angustia".
"Quiero todo, soy puro deseo… él no lo satisface a cabalidad."
"Según Barthes el flechazo es una hipnosis. Soy fascinado por una imagen. Logra raptarme la vez, la caída de los hombros, la esbeltez de su silueta, la tibieza de la mano, la forma de sonreír."
"Cuanto más el otro me ofrece los signos de su ocupación, de su indiferencia, mejor."
Y finalmente me causó gracia la clasificación de las relaciones, ya que apunta que:
"Salir es no estar decidido aún… cuando somos pareja dejamos de salir, en la mayoría de los casos… estamos adentro, fijos, colocados, seguros en un lugar.
Y veo lo ambiguo, porque yo he salido sin salir, jajaj, y eso no ha hecho la relación más estable, soooo, las relaciones no tienen reglas.
Finalmente hay una referencia al papel que tiene la correspondencia (cartas) en la relación.
"La carta es un recorte del tiempo que ya n volverá, tiempo que ya existió."
"Quemar una carta, devolverla, tirarla, para no tener la posibilidad de volver a encontrarse al otro entre mis cosas… renunciar a la tentación de volverse a ver en el otro."
"Cuando uno se deshace de las cartas amorosas, renuncia al otro como objeto. Este acto táctico, higiénico o pirotécnitco reconfigura al yo, reafirma una identidad otra."
Y las cartas de las que nunca me deshice?
tan loca estoy?
Finalmente la ruptura:
"Llorar, llorar, actuar… representar un papel… ser y parecer."
"El olvido es el imperativo de seguir adelante."
"Guardo, recuerdo, repito el relato por temor al olvido, a su destrucción."
Ouch...
"Se archiva lo que se podría olvidar…"
5 comentarios:
Lilit!
Me ha encantado este post. Me hizo reir y darme cuenta de lo ciertas que son algunas afirmaciones. Ahorita mismo me voy a poner a buscar ese texto.
Un abrazote!
Mmm... te odio sabes??? jajaja no mentira... Muy pero muy bueno... mmm ¿será que lo aplicas? jajaja. Gracias, entendí muchas cosas..
y si somos todos "so alike"??? yo me quedo en la parte de las dudad siempre
ouch! Algunas cosas si me dieron una bofetada de tu post pero supongo que es porque son verdad...
Saludos
chistoso e interesante post :D jeje.. saludos amiga
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