miércoles, 5 de octubre de 2011

mudanza

Me voy de este blog, me mudo...

...

sin palabras

martes, 4 de octubre de 2011

busco la felicidad afuera de mí, porque no encuentro nada dentro.
busco un texto para leer, una película, una serie de tv, busco mil y una actividades, huyo, hoy como una condenada de este abismo que siento cuando estoy conmigo
intento pensar en lo que sí tengo, en lo que no me falta, y me importa tan poco todo eso, que es tanto.

voy a clases y logro sonreír, logro la paciencia que había agotado, me divierto en mi clase como hace rato no me divertía.
voy a la F. y veo a mis compañeros y me alegro, me alegro otra vez de ver gente, de charlar, de verlos reírse.
llego a la casa y me esperan los gatos, llenos de alegría por verme, me buscan, me miman, juegan conmigo, intento sonreír.
pero a esta hora estoy tan agotada de sentir que tengo que sentirme bien que ya la sonrisa se nota falsa.
esta parte de mí me aturde, esta yo tan alicaída, tan necesitada, esta no me gusta tanto como las otras, estoy un poco peleada con esta parte de mí, estoy aburrida de que sea la prioridad.

ayer

y te decía ayer que me siento la más cursi, y me decías tú que te sentías igual, pero mientras yo hablo en presente tú insistes en el pasado, allí donde me dejaste meses atrás.
me aferro a un espejismo imposible de alcanzar.
será el proceso, será esto parte de mi recorrido, será que me puse una trampa de la que no puedo salir
será que aún tienes luces encendidas para mí

será la nada y por eso no comprendo

te decía yo ayer, pero por qué olvidarte, por qué me tengo que desenamorar de alguien que me dice que me ama y a quien le creo y me obligo a recordar por qué y me obligas a recordar por qué

y te decía ayer que esto es muy cruel porque olvidar como tarea no me funciona, porque no quiero olvidarte, porque solo puedo pensar en borrarte para olvidarte y eso implica desaparecer un poco, borrarme también un poco

y si te borro no hay vuelta atrás, pero igual siento que ya no hay nada por hacer, que no tengo opciones y así y todo me niego a olvidarte

empiezo el recorrido pero sigo viendo hacia atrás, sin miedo a convertirme en estatua de sal

a lo mejor ya soy de sal, y por eso siento que me desmorono

te hablo y es como hablarle al viento, porque no me escuchas
te digo tantas cosas, me desnudo ante ti, te digo a gritos que te quiero
pero no me escuchas, porque mientras yo me niego a levantar el muro tú lenvantas uno nuevo, otro más

necesito una pista, una, una señal
necesito una certeza

y te la pido a ti, a ti que no me escuchas, a ti que ya casi ni me ves

estoy perdida, camino en círculos con los ojos cerrados, digo que busco una salida cuando sé que camino en círculos y estoy consciente de mi ceguera

qué estoy esperando, qué me retiene


¿cura una canción cualquier ausencia?

http://grooveshark.com/#/search?q=no+te+cambio+alejandro+filio


Compañera si me alejo un día
una tarde, una mañana, un junio
sólo es momentánea la partida
no te escribo en despedida
porque no levanto un muro

Llevo tu cintura bajo el brazo
brilla a cada nota, en cada aplauso
cura una canción cualquier ausencia
y aligera la impaciencia
de regreso hasta tu abrazo

No te cambio por un verso,
una voz, una palabra,
eres parte de este intento
de estas manos, de esta causa
y no vale una tonada
más que el tono de tu cuerpo
cuando cae sobre la almohada
la tormenta de tu pelo

Compañera si despiertas una
piensa que uno somos en silencio
es la soledad buena fortuna
cuando brilla entre la espera
de quien prometió regreso

No es esta verdad antagonismo
contra la verdad que nos ampara
no hay rivalidad, no existe abismo
entre métricas y ritmos
y mi boca por tu espalda

No te cambio por ...

noche de aeropuerto

hoy llega mi querida G. Estoy feliz de tenerla acá, feliz de volver a vernos, feliz por este año de reencuentros familiares.

y que sea lo que sea


herida

No entiendo esas reacciones, no entiendo esas actitudes. Por qué discutir?, para qué? porque el otro no reacciona tal como esperábamos?
De verdad es tan terrible eso?

lunes, 3 de octubre de 2011

reiniciar el sistema

Es un reto emprender una nueva aventura sintiéndome nueva y limpia.
Es difícil dejar todo atrás sin arrepentimientos y continuar.
Es un reto a la constancia, y yo soy algo así como inconstante...
No permitirme recordar para dejar de una vez la tristeza atrás.
Levar anclas.
Y aquí voy, armando las piezas de mi rompecabezas, reinventándome.


domingo, 2 de octubre de 2011

sin arrepentimientos

No estoy arrepentida, no estoy enojada. Viví experiencias gratas, sentí emociones importantes, tomé grandes decisiones, me di oportunidades que no me había dado antes. Amé como adulta, como no había amado antes. Me equivoqué bastante, tomé malas decisiones, lastimé.
No me puedo arrepentir de haberlo entregado todo, de haberme sentido amada intensamente.
 Es solo que esa historia no podía ser, es solo eso, las diferencias fueron demasiadas, el abismo se hizo enorme.

Fuimos dos fuegos intentando aplacarse mutuamente, eso nunca se iba a solucionar.

Gracias por todo, gracias por cada abrazo, por cada beso, por cada desayuno, por cada flor, por cada mensaje, por los planes y los viajes, por los sueños, por la vida juntos estos meses. Gracias por todo desde lo profundo de mi corazón.
El tiempo te relaga perspectiva, así que estoy recibiendo ese regalo, buscando otros lugares para mirarme y mirar las cosas, el pasado, el presente.


un día a la vez

Esa es la solución, un día a la vez, para qué más. De a poco se construye, despacio.
Desayuno con amigos, almuerzo con amigos, casa llena, cine en la tarde. Fin de semana especial, despedidas definitivas, encuentros y desencuentros.


Me siento bien, tranquila, retomando el camino que dejé el viernes, hablando de otras cosas, sin pensar en nada, riéndome, conociendo gente.

La llamada de rigor de mi papá preocupado. "Cómo estás?" Bien, estoy bien, tranquila. "¿Novedades?" Ninguna, todo tranquilo. "Ah bueno, bien."

En un nuevo mes, en un nuevo momento, optimista, curiosa, ocupada, con mucho trabajo pendiente, con final de módulo F.

Ocupada, con la mente en otras cosas.

Bien, buen domingo.

sábado, 1 de octubre de 2011

desapegos

Debo aprender sobre el desapego, debo aprender a dejar partir a las relaciones, a las personas, a las cosas, a los sentimientos, sin dolor, solo liberar el peso, quedarme con lo bueno y seguir.
Hoy nuevamente sentí dolor intenso, angustia, pánico.
Hoy otra vez caí en lo profundo, me sentí sola, vulnerable, abandonada.
Yo me prometí a mí misma terminar todo en septiembre, levan anclas y partir y fui débil, me quise regalar un día más de angustia, incertidumbre y dolor, y eso fue lo que gané.


Quiero a alguien que luche por mí, que me ame como soy, a quien no le afecte mi pasado, alguien que pueda superar mis errores, ayudarme a mejorar, alguien con quien compartir en paz una vida grata, eso, alguien con quien la vida sea grata, alguien a quien al abrazar me haga sentir como en casa y a quien yo le pueda hacer sentir igual.

Una relación en la que no cuesten el compromiso, la paciencia, la libertad. En la que la confianza prime, en la que una disculpa solucione los pequeños errores, en la que se pueda continuar pese a discutir o tener desacuerdos, en la que el pan de cada día no sean las discusiones sino el amor.

Tengo tantos deseos de sentirme valorada, querida, apreciada. Quiero tanto escuchar que hago algo bien, que mi amor le hace bien a alguien.

Entre ayer y hoy he vivido en una montaña rusa sin freno, ha sido tan doloroso. Cómo puedo sentir el cielo y el infierno al mismo tiempo, cómo, cómo pude llegar hasta ahí.

Tenía tantas ganas de que él viniera y me dijera que lo vamos a intentar, que nuestro amor se merece una oportunidad, que es hora de crecer y hacer las cosas bien, de empezar de cero.

 A cambio me encontré con una montaña enorme de miedos, rencores y reproches. Cómo quisiera pequeño mío saber cómo quitar de tu alma tanto enojo, tanta rabia y dejarte en paz, en calma.


otra vez dejé de creer en el amor, como hace años me pasó, como me prometí que no me volvería a pasar.
otra vez puse mis esperanzas completas en un futuro compartido y me di durísimo contra el planeta, con todas.

Otra vez a recoger pedazo por pedazo, a parcharme, a lamerme las heridas, sola, evitando sentir su ausencia, evitando su presencia, sus recuerdos.

Por favor alguien dígame cómo supero esta etapa y sigo, cómo logro quedarme solo con lo bueno, cómo deja de dolerme todo.






entre el amor y el olvido

No puedo olvidarte, a ratos porque creo que no quiero, a ratos porque siento que no es posible y ya.
Pasan los días sin verte y me siento dividida. Soy dos.
Una que puede vivir sin verte, sin saber de ti, pero que no deja de pensar en ti.
La otra, que no se aguanta las ganas de correr a tus brazos, de buscarte, la que no piensa, la que no medita, la que actúa por impulso, la fuerte, la débil.
Estoy escindida, me partiste.
No sé en qué lugar estamos, no sé que nombre darle a esto, pero aún no pierdo tu fragancia, la memoria de tu cuerpo, los recorridos.
Pierdo la voluntad cuando veo tus ojos, me dejo llevar por el deseo, por la alegría, por la única certeza que tenemos.
Esa energía tan fuerte que fluye, que nos amarra, esa intución sobre el otro, esa espera, escondidos, viéndonos sin vernos, detrás de una puerta, al otro lado de una ventana, rodeados de gente, viéndonos sin vernos.
Y en ese momento, en ese que solo tú y yo comprendemos, me pierdo y te encuentro, en ese momento el  todo desaparece y solo existimos tú y yo. No es necesario hablar, las miradas lo dicen todo, en ese momento ahuyentas mis dudas y sin embargo la distancia continúa.
No sé por qué tiene que ser tan difícil, no sé por qué el miedo nos gobierna y nos define.
No debería ser tan difícil, no debería ser tan doloroso.
Estás aquí, en mi ciudad, te veo cada semana en esos corredores, te veo y no te veo, te veo e intento suponer que no eres tú, para no temblar, para dejar de tropezarme contra mesas y sillas, para dejar de sentir que mi cuerpo está subido en una montaña rusa sin límites.
Intento ocupar mi tiempo en millones de actividades, y sin importar la actividad, el día o la hora tú me persigues. Estás en todos los lugares, estás en todas las canciones, estás tan dentro mío que siento que ni partiéndome en pedazos saldrías del todo.
Busco nuevas dimensiones en mi vida y resulta que estás en todas, busco nuevos lugares y solo pienso en la felicidad que habría sentido si estuviéramos ahí juntos.
Veo un cuadro, una pintura, una película, un noticiero y necesito compartirlo contigo, preciso tu comentario.
Cómo apagar todo esto, cómo si cada vez estás más presente en todo.

como gata

Como gata boca arriba

Gioconda Belli


Te quiero como gata boca arriba,

panza arriba te quiero,

maullando a través de tu mirada,

de este amor-jaula

violento,

lleno de zarpazos

como una noche de luna

y dos gatos enamorados

discutiendo su amor en los tejados,

amándose a gritos y llantos,

a maldiciones, lágrimas y sonrisas

(de esas que hacen temblar el cuerpo de alegría)



Te quiero como gata panza arriba

y me defiendo de huir,

de dejar esta pelea

de callejones y noches sin hablarnos,

este amor que me marea,

que me llena de polen,

de fertilidad

y me anda en el día por la espalda

haciéndome cosquillas.



No me voy, no quiero irme, dejarte,

te busco agazapada

ronroneando,

te busco saliendo detrás del sofá,

brincando sobre tu cama,

pasándote la cola por los ojos,

te busco desperezándome en la alfombra,

poniéndome los anteojos para leer

libros de educación del hogar

y no andar chiflada y saber manejar la casa,

poner la comida,

asear los cuartos,

amarte sin polvo y sin desorden,

amarte organizadamente,

poniéndole orden a este alboroto

de revolución y trabajo y amor

a tiempo y destiempo,

de noche, de madrugada,

en el baño,

riéndonos como gatos mansos,

lamiéndonos la cara como gatos viejos y cansados

a los pies del sofá de leer el periódico.



Te quiero como gata agradecida,

gorda de estar mimada,

te quiero como gata flaca

perseguida y llorona,

te quiero como gata, mi amor,

como gata, Gioconda,

como mujer,

te quiero.



viernes, 30 de septiembre de 2011

delete

un amigo me dijo el otro día algo como "aprende a borrar, haz delete", y ese día empecé a borrar, cada día he borrado algo, un número, un mensaje, una foto. y tenía razón, todo empieza a olvidarse y me siento más ligera.

10 K por mi Humo

Hoy corrí 10 kilómetros, uno por cada año con mi gato. Reto cumplido.

en un lugar especial

no esperaba recibir un correo que recibí, lo que decía me rompió el corazón, me dejó un hueco enorme en el pecho, me destrozó. Luego los vi juntos, y eso terminó conmigo, con lo que quedaba de mí.
no sé por qué me hizo eso de ese modo, siento que me quiere herir, que, como un niño, rompe los juguetes con tal de que nadie más los toque.
sentí niveles de dolor que no había sentido en años, se despertaron mis más profundos temores y, como Alicia, caí en un hueco profundo y sin fin en el que aún estoy.
la depresión es una etapa de este proceso de ruptura y pérdida, de distancia.
me sentí traicionada de muchas formas, me sentí boba, ingenua.
sentí rabia, ira, odio, sentí muchas cosas feas, y eso me puso aún más triste.
quisiera ser zen y poder de verdad vivir un día a la vez.
y es gracioso, pero lo que me enganchó de esa relación al principio fue que eso sentía, que al fin tenía la capacidad de disfrutar el momento, de olvidar el pasado y no darle demasiada importancia al futuro.
han sido días agónicos, insoportables.
mirar su pillama aún en mi cama, aún con su olor, y saber que no lo volveré a ver, no con los mismos ojos. saber que no estará más en mi cama, que no será más mi compañero, que todos los planes se rompieron, tomar conciencia de todo eso fue muy doloroso.
me aterré, sufrí mucho, con mucha intensidad, imaginé posibles respuestas y diálogos.
me equivoqué de muchas formas, durante mucho tiempo.
necesito pensar en eso, y también pensar en nada.
el tiempo pasa, el corazón se reconstruye, y aunque me siento aún en el hoyo, creo que dejé de caer.
necesito aún más distancia de la situación, del dolor, de mí misma.
necesito dejar de pensar en él y pensar en mí.
es un proceso tortuoso.
tengo que volver a conocerme, a reconocerme.
no me interesa una nueva relación, no por lo pronto, no podría eliminarlo de esa manera.
aún siento enojo y quiero dejar de sentirlo.
y pese a todo el dolor me veo fuerte, más fuerte de lo que siempre creo que soy, pero temo acorazar aún más mi corazón, no quiero eso para mí.
quiero seguir apostando el todo por el todo aunque me equivoque, quiero tener fuerzas para entregarme otra vez y para querer.
quiero en algún punto desear otro cuerpo.
aún es temprano para eso, para mí.
por ahora estoy conmigo, a quien había abandonado me muchas maneras por demasiado tiempo.
el adiós es doloroso por ahora, pero supongo que pronto estaré bien y que todo cobrará un nuevo sentido.

triste, triste, triste

Ha pasado una semana, solo una semana, y parecen años. A ratos estoy muy bien, muy tranquila, muy cómoda, pero hay otros momentos en los que siento un dolor terrible perforándome el pecho. He estado tan triste que no he podido llorar más que por ratitos y siento que tengo litros de lágrimas atorados. Hoy pensé en ir a buscarlo a su casa, en verlo, en llorar con él, luego pensé que para qué todo eso. A él seguramente no le importa cómo estoy, cómo me siento, y yo me sentiría aún más triste al sentir su frialdad. Si en la F. no me regresa ni a ver será porque desaparecí del todo.
Veo a su novia y siento una rabia terrible, incontenible, aunque sé que ella no es nadie, que no pinta nada en mi vida, que no es parte del infierno en el que vivo por ahora.
La ausencia del otro es mortal. Saber que ya no es parte de mi vida es doloroso. Quiero ver la luz del otro lado, pero por lo pronto no la veo.
Y sigo sin entender cómo alguien que dijo quererme puede producirme un dolor tan grande. Lo peor no es que tenga una nueva persona junto a él un día después de haber terminado, lo peor es suponer que ya estaban juntos antes, que él preparaba ya su partida construyendo una nueva relación. Me siento tonta por no haber desconfiado nunca, al mismo tiempo me siento honesta porque mientras estuve con él nunca pensé en nadie más y ahora que no estamos juntos tampoco pienso en nadie más. No me cabe en la cabeza meter en mi vida a alguien cuando aún pienso en otra persona, no puedo ni pensar en que otras manos me toquen, en besar otra boca, en compartir mi cama con nadie. No puedo pensar en sentir ternura y amor por nadie más, por nadie, en realidad. La tristeza profunda no me deja sentir amor, solo rabia. Y lo que más trisite me pone es que no me gusta sentir cosas feas, no me gusta sentir enojo por algo que sé que no tiene solución, que no depende de mí.
Es la segunda vez que me siento de este modo, tan traicionada, y no porque haya una persona nuevas con mis ex pareja, sino porque al final me doy cuenta de que no conocía a esa persona, de que es un total extraño.

del 1 al 10

del uno al diez hoy digo ocho

loca

me pasan un millón de cosas por la cabeza, un millón, cada cosa es más loca que la anterior.
releo el blog, y leo lo que pasó hace tiempo.
Hace un año el Humo se fue, hace un año nacieron el Athos y el Porthos, hace un año corrí 10 kilómetros, hace un año muchas cosas eran aboslútamente diferentes.
Este año mucha gente se casó, este año mucha gente regresa, este año siento como si las cosas volvieran a su lugar, si es que tienen un lugar.
Anoche un bus se chocó contra otro en la esquina de mi casa.
Hace un año hubo caos democrático en mi país.
Hoy hace un día soleaado y maravilloso, estoy  metida en la cama aunque ya son las 10 am, tengo un almuerzo, en la tarde voy a grabar música, mañana dicto clases al mba.

Demasiados planes, demasiadas cosas establecidas, qué le dejo a la casualidad?
N. me habló de una serie "The big C", hoy vi dos capítulos.

Suena el teléfono y contesto, la comunicación falló, digo aló y el gato se despierta y piensa que le hablo y me contesta, me río y decido levantarme, desayunar, salir a disfrutar de este sol, de la gente con la que quedé hoy.

Día extraño, al fin se termina este mes.

Mi papá me escribió ayer al celu, en lugar de llamarme. "Cómo estás" Bien, estoy bien, ya duermo, ya como, estoy alegre, todo toma otro rumbo. "¿un buen rumbo?" Sí, un rumbo sola pero tranquila. "Me cotento muchísimo"
 Me reí porque no pudo llamarme para hablar, supongo que  le resulta difícil preguntarme directamente lo mismo.

un buen rumbo, un buen rumbo, no sé qué es un buen rumbo, pero me gusta sentir que estoy rumbo a algo, pero siempre estamos rumbo a algún lugar no, siempre.

 Rumbo al infinito y más allá, rumbo al trabajo, rumbo a las citas, rumbo a algún encuentro, en el camino.

jueves, 29 de septiembre de 2011

increíble

Estaba tan cegada, pero tanto, que no vi lo evidente.
Luego de este tiempo de agotamiento mental y físico releo cositas que había escrito por ahí donde estaban todas las respuestas a mis preguntas, esas que decidí ignorar.

Las cosas pasan, la gente vuelve. La próxima semana llegan cuatro personas queridas y yo casi sin enterarme por estar concentrada en mi dolor. Viene D., viene G., vuelve N. y el JP.
Y al darme cuenta de que regresan me volvió el alma al cuerpo, me sentí alegre, me sentí un poquito más yo al pensar en esas personas que ahora vuelven para estar cerca.

 En estos días solitarios no he estado tan sola. Ha surgido gente nueva, ha vuelto alguna de antes, a la que había dejado de ver. No había pensado en ... en mucho tiempo, solo lo había visto una vez desde que regresó, antes la casualidad nos juntaba mucho en muchos lugares y desde que volvió, hace un par de meses, no nos habíamos encontrado más que esa única vez en el supermercado.
Ayer, en una charla casual salió su nombre y me enteré sin querer queriendo de que cuando tuvimos algo yo le rompí el corazón, y me sorprendí, porque pensé que yo había sido  la única con el corazón roto.
 Entonces volví a pensar en él y a tener ganas de encontrármelo, luego de todo este tiempo sin vernos, ni hablarnos, teniendo referencias solo por terceros, lo recordé claramente y sentí curiosidad.
A ver si la casualidad nos junta a propósito de los amigos que regresan.

Hoy chateé con F. Fue reconfortante saber de su vida luego de este tiempo de distancia, siento que los abismos se acortaron.

Hay aún un par de asuntos que me faltan resolver para sentirme al día, sin pendientes, pero para eso todavía falta un tiempo.

R. me ha apoyado mucho, ha sido una gran compañía buscándome luego de clases, llevándome al cine, yendo a exposiciones, proponiendo paseos y desayunos. Me puse a pensar también en que siempre ha estado, desde hace mucho, y eso es gratificante, que la gente esté, estar para la gente.

Volví a tener la relación cercana que siempre tuve con L. ha sido bueno hablar seguido, vernos, saber sus historias, sentirme escuchada y apoyada.

Siento que poco a poco vuelvo. Y mientras más lo pienso, más lejos me veo de lo que fui en estos últimos meses.

Dejé de escribir, no hice un diario, como los que siempre había llevado, y esta semana empecé uno, muy significativo.

Vuelvo al blog.
Vuelvo a leer mucho.
Vuelvo a dormir.
Vuelvo a salir.
La gente casualmente regresa, y todos a la vez, eso me trae mucha alegría.
Vuelvo a sentir alegría en mi casita, con mis gatos.
Vuelvo a planear viajes.

No me di cuenta hasta ahora de lo triste que estuve por tanto tiempo, de lo bloqueda que me quedé desde febrero de este año, cuando pasaron tantas cosas tan feas.


R. dice que seguramente me hacía falta pasar por esto, que por eso dejé que pasara.

En realidad ahora no pienso en por qué pasó o no todo lo que pasó. Ahora prefiero no pensar, no recordar, dejar mis energías para otras cosas.

Los días pasan rápidamente, tanto que me asusta. El tiempo, el tiempo, el tiempo, que lo cura todo.

martes, 27 de septiembre de 2011

...

perdí la perspectiva, perdí el rumbo, el dolor me inundó y dejé que me poseyera.
Quiero volver a tener el control de mi vida, quiero volver a sentir.
No hay culpables, por lo tanto no hay enojo.
Es la ley de la vida, algo se termina solo para dejarle lugar a algo más.
Mi mamá siempre dice que hay que vaciar para llenar y llegó mi momento de vaciar.
De esto saqué varias cosas, como de todo. Tengo una nueva gran amiga, alguien que ha estado conmigo en mi proceso.

Sé que el dolor es pasajero, aunque intenso.
Sé que luego de las tormentas viene la calma, sé que esa es una certeza.


Las ausencias duelen, pero de esas ausencias hay que sacar provecho.



Es el momento de reconocerme, de reencontrarme.
A los 33, como mujer adulta y soltera, en mi mejor momento.

De él no vuelvo a hablar, él tiene su vida en su nuevo tiempo.
Yo tengo mi vida, en mi nuevo tiempo.

Salud, por los nuevos tiempos.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

alucinada

Para dejar el bajón de lado decidí acudir a la acupuntura. Oh maravillosa terapia china. Al salir de la consulta, como por arte de magia, ya me sentí mejor. Me pincharon, inyectaron, hablaron y escucharon. Pude dormir delicioso.
En fin, me siento como nueva. Además he visto a mucha gente a la que no había podido ver en los 10 meses de encierro (en pareja) que viví.
Ha sido muy bueno ver a tanta gente, y reencontrarme con otra.
Del 1 al 10 ayer decía 6, hoy digo 7.