Luego de Match Point
¿Existen las casualidades?
Estoy empezando a creer que es verdad que sí, que nada es casual, que las cosas pasan por algo.
La gente se cruza en el camino por alguna extraña y oculta razón, que terminamos descubriendo tiempo después.
2046
¡Qué peliculón! Es una de las mejores películas que he visto. Una de las más tristes, una de las más conmovedoras, una de las más certeras.
“En el amor hace falta coordinación, no es suficiente encontrar a la persona adecuada, hace falta encontrarla en el momento adecuado.”
El día en que vi esa película tuve la certeza de haber conocido al amor de mi vida, de haberlo amado, de haber sido amada y de haberlo perdido también.
“El corazón es un órgano de fuego” El paciente inglés
El amor es un fenómeno misterioso, aterrador, inspirador, mágico, etéreo. Por eso nunca lo alcanzamos. Como las pompas de jabón, se deshace al tacto.
“Cuando nací me dije: “Volveré al lugar del que vine.” Cuando tenía tres años, una tempestad visitó Bisharri y me saqué la ropa gritando: “¡Me iré con la tormenta!” A los doce dije: “Estaré aquí un tiempo porque tengo algo que decir.” A los veinte había olvidado lo que tenía que decir. Alos treinta y tres comencé a recordar.” Jalil Gibrán
¿Existen las casualidades?
Estoy empezando a creer que es verdad que sí, que nada es casual, que las cosas pasan por algo.
La gente se cruza en el camino por alguna extraña y oculta razón, que terminamos descubriendo tiempo después.
2046
¡Qué peliculón! Es una de las mejores películas que he visto. Una de las más tristes, una de las más conmovedoras, una de las más certeras.
“En el amor hace falta coordinación, no es suficiente encontrar a la persona adecuada, hace falta encontrarla en el momento adecuado.”
El día en que vi esa película tuve la certeza de haber conocido al amor de mi vida, de haberlo amado, de haber sido amada y de haberlo perdido también.
“El corazón es un órgano de fuego” El paciente inglés
El amor es un fenómeno misterioso, aterrador, inspirador, mágico, etéreo. Por eso nunca lo alcanzamos. Como las pompas de jabón, se deshace al tacto.
“Cuando nací me dije: “Volveré al lugar del que vine.” Cuando tenía tres años, una tempestad visitó Bisharri y me saqué la ropa gritando: “¡Me iré con la tormenta!” A los doce dije: “Estaré aquí un tiempo porque tengo algo que decir.” A los veinte había olvidado lo que tenía que decir. Alos treinta y tres comencé a recordar.” Jalil Gibrán
2 comentarios:
chuta.. eso de querer lo mismo el mismisiisisisiisisimo momento que el otro.. uy.. cagado esta....
won kar... phuf.... demaciado..es siempre un placer..
jeje.. bacanes peliculas...
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