sábado, 18 de febrero de 2017

como el ave fénix

Luego de meses de pesadilla he comenzado a renacer.
Siempre se aprende algo, siempre y yo he aprendido bastante.
1. Hay que seguir al instinto, casi nunca se equivoca.
2. La familia de sangre y la familia urbana son los ejes de mi vida, mis soportes, mi oxígeno.
3. Hay gente a la que no vale la pena dejar entrar al delicado mundo que solo nos pertenece a nosotros y a los nuestros.
4. La gente miente mucho, todo el tiempo, a todas horas.
5. La gente manipula mucho, a todas horas.
6. No toda la gente miente y manipula.
7. Tengo a gente maravillosa rodeándome.
8. Lo inútil se evapora y se va.
9. Me gusta mi vida con la gente que tengo.
10. Fue una lección dura, pero creo que la aprendí.

1 comentario:

Olivia dijo...

Querida, al final lo bueno es que siempre aprendemos cosas, y es cierto, tienes gente rodeándote que te quiere bien y que nunca va a dejar de ser tu soporte, que siempre va a estar ahí ofreciéndote el hombro para que te apoyes. Al final yo creo que la vida se encarga de poner las cosas en su sitio, aunque duela y aunque nos cueste. Te quiero mucho.